El denominado Frente Nacional Anti Amlo (FRENA) se ha dado a notar últimamente por sus desaguisados más que por sus propuestas políticas. Argumentaré aquí que este grupo (como se le quiera denominar) tiene derecho a manifestarse, algo que puede resultar obvio, pero también haré algunas reflexiones acerca de la acción directa y la protesta social en el contexto de la 4T.
Frena y la “oposición” al obradorismo
Existe la Oposición al obradorismo: morras, el magisterio disidente, grupos indígenas, ecologistas e incluso podríamos decir que una oposición electoral a través de partidos como el PAN, grupos irreconciliables entre sí quizás pero oposición formal, es decir, grupos que tienen una agenda definida y contravienen parcial o totalmente el proyecto encabezado por López Obrador.
También existe la “oposición”, particularmente de sectores como FRENA, que no tienen una agenda política clara o definida, sólo los une el anti-obradorismo y una serie de delirios acerca de que Amlo es comunista, dictador y anti-religioso, cosas que son tan evidentemente falsas que no vale la pena profundizar en ellas.
Yo sostengo que FRENA, como cualquier otro grupo organizado o no, así como cualquier persona, tiene el legítimo derecho a disentir, a expresarlo y a manifestarse. Sin embargo, el hecho de disentir u opinar diferente no es un podio de superioridad moral ni un certificado de tener la razón: exponer las opiniones o posiciones políticas tiene como consecuencia una potencial respuesta que resulta igual de legítima.
Acción Directa y procesos políticos en la 4T
La Acción Directa, entendida como un conjunto de acciones políticas que pueden ser consideradas “ilegales” por las leyes establecidas (plantones, marchas, romper cristales, hacer barricadas, tirar piedras a la policía etc.) tienen la finalidad de presionar a la autoridad para tomar determinada decisión o bien simplemente son actos simbólicos para llamar la atención del conjunto de la sociedad sobre algún tema cuando todas las opciones “legales” ya no son suficientes o no responden a las necesidades de los grupos que realizan estos actos.
Cuando hablamos de la oposición al obradorismo hablamos de Acción Directa en diversas formas: desde la toma de autobuses por parte de normalistas, la ocupación de la CDNH y las distintas intervenciones en instancias locales de derechos humanos por grupos de morras, las manifestaciones de defensorxs del medio ambiente y un largo etcétera de acciones que dan cuenta de procesos políticos de oposición completamente genuinos. ¿Es el plantón de FRENA Acción Directa?
El performance de FRENA
Mi punto de vista es que todas estas manifestaciones de FRENA, si bien tienen un recubrimiento, una apariencia de Acción Directa, más son un performance opositor que le da pretexto a grupos de extrema derecha para expresar sus más bajos instintos racistas y clasistas. Un mero acto performativo.
La falacia va más o menos así: FRENA es un grupo de ciudadanos que se oponen a López Obrador y ejercen su derecho a la libre manifestación en su exigencia de pedir la renuncia del presidente, este derecho es tan válido como el de cualquier otro grupo de ciudadanos.
¿Por dónde empezar? A ver: para empezar habría que preguntarnos a quién representa realmente FRENA, claramente no a los desposeídos ni a personas con una causa social concreta (como víctimas de la violencia), más bien representa a ciertos sectores religiosos y clases medias-altas que ven en López Obrador (insisto, de manera delirante) una representación de todo el liberalismo secular que rechazan, aunque lo nombren “comunismo”. Ahora bien, esto de pedir la renuncia de Obrador es completamente absurdo, sería mucho más razonable organizar el voto masivo para la revocación de mandato en 2021 pero eso no forma parte de su agenda. Dado que las causas de su malestar se basan en interpretaciones absurdas de las acciones del gobierno de la 4T (como que Amlo nos va a llevar al comunismo, que quiere suprimir la libertad religiosa o imponer agendas como la “ideología de género”) concluimos que sus “causas” no tienen mucha legitimidad, vaya, ni siquiera anclaje en la realidad.
En fin, yo sigo pensando que tienen todo el derecho de hacer los plantones que quieran y que no debe haber uso de la fuerza pública contra éstos…solitos se van a cansar de estar sufriendo carencias cuando realmente no están perdiendo nada.